En 1541 fue descubierto el Valle de Aburrá, dando inicio a los primeros asentamientos en la región. Con el tiempo, en el corazón de lo que hoy es el centro de Medellín, comenzó a formarse una comunidad que sentaría las bases de la ciudad.
Uno de los pilares de su desarrollo fue la construcción del primer templo, ubicado en el actual Parque Berrío: la Parroquia Nuestra Señora de La Candelaria. Este lugar se convirtió en el punto de encuentro por excelencia de los habitantes, especialmente los domingos, cuando las misas reunían a las familias, los comerciantes y los viajeros.
Así, entre la fe, el comercio y la convivencia, Medellín fue creciendo y transformándose en la ciudad vibrante que conocemos hoy.
Lo que hoy conocemos como la vibrante Medellín nació con un espíritu humilde y trabajador. En 1675, fue fundada la Villa de Nuestra Señora de La Candelaria de Medellín, un pequeño poblado rodeado de montañas, caminos de tierra y templos de fe profunda. Con el paso del tiempo, sus calles comenzaron a llenarse de comercio, cultura y movimiento. La construcción de iglesias, plazas y talleres fue marcando el ritmo de su crecimiento, mientras la fe y el trabajo unían a sus habitantes.
Aquella villa colonial fue dejando atrás su sencillez para convertirse en una ciudad llena de vida, innovación y progreso, sin perder jamás su esencia: un lugar donde la historia, la devoción y la tradición siguen latiendo en cada rincón de Medellín.
Las iglesias fueron los primeros espacios de reunión en la ciudad. Las misas dominicales reunían a los habitantes, fortaleciendo la convivencia y el sentido de comunidad.
Alrededor de los templos nacieron plazas, mercados y caminos, lo que impulsó la expansión del centro de Medellín y la organización de sus barrios.
Las órdenes religiosas, como los jesuitas y franciscanos, fundaron escuelas y colegios que dieron origen a importantes instituciones educativas y culturales.
Las iglesias de Medellín conservan valiosas obras de arte, vitrales y diseños arquitectónicos que reflejan la historia, la fe y la evolución estética de la ciudad.